RETROCESO

Y de repente me encuentro nuevamente en mi esquina, rodeada del precipicio oscuro y cruel, se me acabaron los cigarros y el corazón me late fuerte...me tomé de un solo trago la botella de alcohol y me cayó como bomba, ahora no sé como quitarme esa sensación de vacío de encima, quise apurar algo que debió tomarme mucho más tiempo y lo único que conseguí fue echarme una bomba de tiempo encima y encadenarme a esta esquina oscura que estaba a punto de dejar. Siento que mis alas están partidas, siento que en mi corazón hay un agujero negro que poco a poco está tomando y absorbiendo todo a mi alrededor, siento una enorme piedra encima de mi cabeza y las manos me fallan, no puedo sujetar el último cigarro que tengo, no puedo encenderlo y lo dejo caer al precipicio. De un puntapié boté el traguito de ron que estaba guardando con tanto afán.
Me siento como una sombra oscura que pasea por las calles y no puedo ni prender un cigarro, siento que todo a mi alrededor se oscurece a mi paso como si se marchitara todo a mi alrededor, como si por mi paso se pudriera la vida.
Quiero saltar al precipicio, quiero saltar sin saber si llegaré al otro lado, sin saber si mis alas se extenderán y conseguiré volar, quiero saltar y si me caigo, será el final de esta bella historia y caeré al más profundo de los abismos.
Y aunque no lo crean, éste es el momento preciso de saltar, ahora más que nunca es cuando debo saltar porque de no hacerlo ahora, no lo haría nunca.
Ayúdenme amigos, el momento en el que salte, comiencen a soplar muy fuerte, tal vez con su ayuda pueda planear el abismo y llegar al otro lado, tal vez con su ayuda pueda lograrlo.....

P.D. Por cierto (y aunque no soy de aclaraciones) este pequeño cuento no se trata de personas, se trata de oportunidades...